Por Juan Tomás Valenzuela
Tanto que yo defendí
a esta sucia banileja
y ahora viene esa pendeja
y me lo pasa pú el fuí.
Tanta mierda que escribí
a favor de esa señora,
para que venga ella ahora
a negociar la querella,
para buscarse lo de ella,
presumiendo de pastora.
Ayer, esta sinvergüenza,
salió hablando de perdón
para el abusadorsón
que le infirió tal ofensa.
Lo lindo que ella comienza
a hablar de las escrituras,
para ocultar las diabluras
que le aceptó a Villalona,
y la manera burlona
en qué habla esta caradura.
Más por suerte el ministerio,
ante la inconducta de ella,
continuará la querella
con absoluto criterio.
Se quedará en cautiverio
el que dió las bofetadas
y ojalá a esta descarada
la metan al expediente,
por pesetas, indecente,
come sica y descarriada.
Que sea la última vez
que yo descargue mi enojo
en contra de estos despojos
que actúan con tal bajez.
Ojalá y pongan un juez
como el que anda tras Gonzalo,
que es más terrible y más malo
que el granú de Villalona,
y que condene a esta mona
por negociar con el malo.
Juan de los Palotes
28 enero 2022